La ciudad eslovaca de Trenčín será Capital Europea de la Cultura (ECOC) a partir del 1 de enero de 2026.
Situada en el centro de la región de Považie (de hecho es conocida como ‘La perla de Považie’), cerca de la frontera con la República Checa, se encuentra a unos 120 kilómetros de la capital, Bratislava.
Bajo el lema ‘Despertando la Curiosidad’, la ciudad se convertirá en un centro de actividades culturales durante todo el año.
La apertura de actividades se iniciará del 13 al 15 de febrero aunque el primer acto previsto será a partir del 15 de enero con la exposición ‘Protección de monumentos y arquitectura moderna de la región de Trenčín’.
El proyecto prevé festivales y cooperación internacional con la transformación cultural a través del arte. El programa se llevará a cabo en el centro histórico de la ciudad, que cuenta con 56.000 habitantes, pero también en colegios, instituciones culturales y espacios públicos.
Entre los numerosos actos previstos hay presencia española, el 8 de mayo, se presentará el espectáculo ‘Flotados’ de David Moreno y Cristina Calleja. Asimismo, en octubre una conferencia recordará la obra y legado del escritor checo Karel Capek (1890-1938), inventor de la palabra robot.
Trenčín es la segunda ciudad eslovaca que tiene este nombramiento tras Košice (2013) y compartirá durante 2026 la capitalidad europea de la cultura con la finlandesa Oulu.
Está prevista en enero también la emisión de una moneda conmemorativa de dos euros, con motivo de este nombramiento, cuando además se cumplirán quince años de la entrada de Eslovaquia en la moneda única.
Esta coincidencia forma parte también de este evento, conectando economía, historia y cultura dentro del contexto europeo.
La imagen de los dos euros es el símbolo de la ciudad, el castillo de Trenčín (Trenčiansky hrad), monumento nacional, situado en un rocoso despeñadero.
El histórico castillo formaba parte de las principales rutas comerciales que conectaban Hungría, Bohemia, Moravia y Polonia.
La torre de piedra de estilo románico fue construida por el señor feudal Matúš Čák Trenčiansky (1260-1321). El castillo se remonta al siglo XI, y la torre ha sobrevivido sin grandes cambios, por lo que es el elemento más antiguo de la fortaleza.
El área alrededor de la torre de Mateo cuenta con varios edificios y una capilla. Entre los cuatro palacios góticos originales, tres han sobrevivido: los de Ludovít, Barbora y Zápolsky. También hay una inscripción latina dejada por los legionarios romanos en el siglo II en el 173 en roca donde se asienta el castillo.
Pozo del amor
En la terraza inferior, se encuentra el pozo del amor también llamado pozo de los amantes, de 80 metros de altura, acompañado de un relato mezclado con la historia.
Según la leyenda, fue construido a partir de 1475, durante el mandato del castillo del duque húngaro Esteban Zápolsky (1434-1499), por el comandante turco Omar para rescatar a su amada Fátima (capturada en una anterior batalla) que se comprometió a cavar un pozo en la roca, ya que carecía de reservas de agua, por lo que se convertiría en una fortaleza casi inexpugnable.
Cuenta el relato que trescientos turcos excavaron durante tres años, sacrificando sus vidas, hasta que apareció agua dulce y así Omar se despidió finalmente del duque con la frase: ″Tienes agua, pero no corazón”. Fátima fue liberada pero perdió su velo al salir debido a un arbusto.
En realidad el pozo fue cavado por la guarnición del castillo y vecinos de la localidad entre 1530 y 1540. No obstante, allí cerca se encontraba la posada más antigua denominada Závoj, hoy convertida en restaurante Fátima, en el lugar donde la leyenda apunta que perdió su velo.
La arquitectura del castillo refleja varias influencias debido a numerosas reconstrucciones durante el Renacimiento y el Barroco, recientemente tuvo desprendimientos. Alberga el Museo local donde se exhiben armas, armaduras y piezas de varios siglos. En el interior, la Capilla de Santa Isabel dispone de un hermoso retablo.
Otros edificios destacados de Trenčín son la iglesia católica de San Francisco Javier, construida entre 1653 y 1657, en un estilo barroco temprano, siguiendo el modelo de la iglesia de San Francisco Javier de Viena.
También el monasterio benedictino, Veľká Skalka que se construyó alrededor del siglo XIII, en 1224. Con el tiempo cambió su apariencia y algunas partes fueron reconstruidas, ya que pertenecía a diferentes órdenes religiosas. Hoy es un refugio turístico para cualquier visitante y lugar de peregrinación, el más antiguo de Eslovaquia, con 15.000 peregrinos anuales.
La sinagoga principal, erigida en 1913, es una de las más antiguas y grandes de Eslovaquia, y se ha convertido en un monumento a las víctimas del Holocausto.
Durante la Segunda Guerra Mundial, la mayoría de los judíos de Trenčín fueron enviados a campos de concentración y la sinagoga fue cerrada. La comunidad no se recuperó hasta los años setenta, restaurándola con sus propios fondos.
Las comunidades judías más grandes de Eslovaquia vivían además en Bratislava, Trnava y Nitra.
La sinagoga se encuentra en plaza principal (Mierové námestie), en el centro histórico, que alberga el Ayuntamiento y la columna barroca de la peste (1712) recordando el fin de la epidemia.
En la plaza se encuentra la Casa del Verdugo donde vivió el verdugo local hasta 1790. Entonces la planta baja era una prisión y vivía en la plata superior. Como es natural existe la leyenda que la casa está embrujada y se oyen voces de los torturados cruelmente en la vivienda.
En cuanto a la gastronomía de la zona, predomina la carne (especialmente la de cerdo), patatas, albóndigas, salsas espesas y quesos. En cuanto a verduras, siempre hay col, a menudo en forma de chucrut.
