La Organización Meteorológica Mundial (OMM) sostiene que las lluvias e inundaciones que han azotado a España, causando más de doscientos muertes y grandes daños materiales, corroboran que cada vez se registran más fenómenos meteorológicos extremos vinculados al cambio climático provocado por el hombre, informa la IPS.
Celeste Saulo, secretaria general de la OMM, afirma que «como consecuencia del aumento de las temperaturas, el ciclo hidrológico se ha acelerado. También se ha vuelto más errático e impredecible, y nos enfrentamos a problemas crecientes de exceso o escasez de agua, es decir, lluvias torrenciales o prolongadas sequías».
«Una atmósfera más cálida retiene más humedad, lo que favorece las lluvias torrenciales», resumió Saulo, y lo acontecido en España «pone de relieve por qué la máxima prioridad de la comunidad de la OMM es salvar vidas a medida que el cambio climático potencia las condiciones meteorológicas extremas».
En la Comunidad Valenciana, este viernes 1 de noviembre el número de víctimas mortales por la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) superó los doscientos, miles de vehículos, viviendas, vías, infraestructuras e instalaciones diversas resultaron dañadas, y decenas de miles de valencianos quedaron sin electricidad ni transporte.
La Dana suele producirse durante el otoño boreal porque el calor superficial que queda del verano se encuentra con una repentina invasión fría en el aire procedente de las regiones polares, explica la OMM.
Eso da lugar a un «un sistema de corte» con valores de bajas presiones que persisten durante días y que rotan sobre la región afectada. También afectó al sur de Francia.
«La presencia de aire cálido cerca de la superficie, alimentado por el exceso de humedad del mar Mediterráneo aún caliente, y la inestabilidad generada por el conflicto con el aire frío de la atmósfera superior dan lugar a grandes nubes convectivas», dijo Omar Baddour, responsable de Vigilancia del Clima en la OMM.
Eso a su vez provoca fuertes aguaceros e inundaciones repentinas, indicó Baddour, y «se prevé que el cambio climático haga que estos sistemas sean más intensos debido al calentamiento de las aguas del mar y al aumento de la humedad en la atmósfera».
Por cada grado centígrado de calentamiento, el aire saturado contiene entre siete y nueve por ciento más de vapor de agua por término medio, y ese aumento de la humedad atmosférica incrementa el riesgo de precipitaciones extremas.
Muchos lugares en la región valenciana recibieron más de 300 litros de agua por metro cuadrado. Los días 29 y 30 de octubre, una estación meteorológica de Chiva , al sur de Valencia, recibió 491 litros por metro cuadrado en solo ocho horas.
El aeropuerto de Jerez, en la región de Andalucía, sur de España, recibió el 30 de octubre la cifra récord de 114,8 mm (equivalentes a litros por metro cuadrado) de lluvia en veinticuatro horas, el equivalente a un año de precipitaciones, según la española Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
La OMM recordó que según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, los fenómenos meteorológicos extremos que provocan inundaciones y sequías de gran impacto son cada vez más probables y graves debido al cambio climático antropogénico, el causado por la actividad humana.
También en Europa
Otras partes de Europa también se han visto gravemente afectadas por las inundaciones este año. A mediados de septiembre de 2024, una región muy extensa de Europa Central experimentó lluvias muy intensas, batiendo récords de precipitaciones locales y nacionales.
El Instituto Meteorológico Noruego alertó de un fenómeno del tipo «río atmosférico» –una banda larga y estrecha que transporta vapor de agua desde los trópicos hacia los polos- que afectará a los países nórdicos este fin de semana.
La OMM reivindica su labor de colaboración con sus miembros, los servicios meteorológicos e hidrológicos nacionales, «para garantizar que las previsiones exactas y oportunas lleguen a tiempo a la población y permitan actuar con prontitud».
«Nuestra misión principal es salvar vidas y medios de subsistencia, y esto es lo que impulsa la iniciativa internacional Alerta Temprana para Todos», concluyó Celeste Saulo.