La Caja Negra Ediciones presenta a Nicholas F. Callaway (USA), un artista plástico que se recrea en imaginar algo tan sugestivo y exótico, tan lejano en el tiempo como cercano a nosotros por su iconografía medieval, como la caída de Constantinopla.
Sus imágenes nos evocan los claustros románicos al aire libre, esas construcciones arquitectónicas en piedra salvadas in extremis de ser devoradas por la maleza, como San Juan de Duero.
Sabemos por lo que nos han contado que la caída de Constantinopla en 1453 propició, junto con el advenimiento de la imprenta, la llegada del Renacimiento, con todos aquellos miles de manuscritos que fueron trasladados de Oriente a Occidente para salvarlos de los turcos.
Pero él se fija en otra caída anterior, la de 1204 en manos de los Cruzados y en los siglos que siguieron al semiabandono de la capital bizantina: resulta que, en esos casi 250 años, los famosos rosales de la ciudad se fueron asilvestrando.
Así, cuando las tropas otomanas finalmente abrieron una brecha en las murallas en mayo de 1453, la ciudad estaba llena de rosales en flor, jabalíes y ruinas románicas plenas de arquerías renacentistas. Estas ideas son las que, de manera imaginativa, conforman el marco narrativo de la exposición «La caída de Constantinopla»:
«Cuando empecé a trabajar con tinta roja, negra y gris a base de sellos recombinables de caucho, acababa de volver de un año en Beirut, donde se vivía muy cerca la guerra civil siria. Poco a poco fueron conquistando el proyecto no solo los rosales sino también los niños. Así, por entre una violencia sugerida a través de la ruina, en un ambiente lleno de rosas, jabalíes y arquerías, aparece aquí y allá, de forma fragmentaria, la historia de cuatro hermanos que huyen de la ciudad asediada, imágenes en donde el juego y el ingenio de la infancia se imponen al mundo hostil de los adultos».
De ahí que, en medio del espacio expositivo, haya una sala interior dedicada a los niños y a las mujeres embarazadas que preparan, jugando con piezas de arquitectura desmontables, su fuga.
La exposición entra y sale de distintos formatos, con imágenes que aparecen tanto en pared como en libros de artista y es una invitación abierta a que los visitantes de todas las edades se impliquen de manera activa a través del juego. Al mismo tiempo, con estas piezas resulta imposible hacer alguna construcción concluida, al faltar piezas como vigas o tableros. De ahí que todo acabe en ruinas y la fuga sea hacia ninguna parte.
Sobre el artista
Nicholas F. Callaway es licenciado en lingüística (Reed College, 2007), estudió grabado en la Escuela de Arte de Oviedo, posee un Máster en Investigación Artística y Creación (UCM 2017) y es doctor en Bellas Artes por la UCM (2023) […]
Ha producido seis exposiciones individuales: Insider Out (Casa de Cultura de Avilés, 2011), The Beasts (Sala Borrón, Oviedo, 2012), Estancias (Escuela de Artes de Oviedo, 2016), Shibboleth (Cruce, Madrid, 2017), Si estas paredes hablasen (Instituto Internacional, Madrid, 2018) y Under Over Behind Beneath(UAM, 2021, con Constanza Dessain), y en 2024 La caída de Constantinopla en la Galería Caja Negra.
Su obra ha sido expuesta en centros como el Institut national d’histoire de l’art (París), Centro de Arte Complutense (Madrid), Dilalica (Barcelona), Sala de Arte Joven (Madrid), LABoral (Gijón) o el Museo Arqueológico de Asturias (Oviedo), en la antigua biblioteca nacional de Bosnia y Herzegovina o en un palacio bizantino de la antigua Constantinopla.
- La caída de Constantinopla
- Dónde: La caja negra ediciones
- Fernando VI, 17 (Madrid)
- Cuándo: hasta 30 de julio de 2024