Ecologistas en Acción informa de que vecinos de las urbanizaciones Puentelasierra y Jarabeltrán han alertado del impacto de los trabajos de prevención de incendios que está llevando a cabo la empresa Tragsa por encargo del Ayuntamiento de Valdemorillo, en el barranco del arroyo de San Juan, una zona de fuerte pendiente, repoblada con pino en la década de los años sesenta y sobre la que se ha recuperado un encinar mixto con gran diversidad de vegetación arbórea y arbustiva, además de un bosque galería en el arroyo.
El barranco constituye la zona verde de ambas urbanizaciones y su mantenimiento es competencia de las entidades urbanísticas colaboradoras de conservación. Sin embargo, el abandono durante décadas ha favorecido la densificación y deterioro del pinar. Además, tras el paso del temporal Filomena, se troncharon numerosos pinos y ramas sin que hasta la fecha se hubieran tomado medidas.
Alegando alto riesgo de incendios y falta de medios económicos, las entidades urbanísticas, solicitaron al Ayuntamiento de Valdemorillo que retirase las ramas y árboles caídos y podase y aclarase el pinar.
Sin embargo, a juicio de numerosos vecinos y de las organizaciones ecologistas ARBA, Asociación Ecologista del Jarama El Soto, Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid, GRAMA, Jarama Vivo y Liberum Natura, se trata de una actuación excesiva que está destruyendo una zona de bosque mediterráneo de gran valor y desarrollando actuaciones invasivas y perniciosas sobre el cauce del arroyo de San Juan y otros arroyos menores como el de la Cuerda Herrera, así como en el bosque de galería que constituye un hábitat de interés comunitario (92AO Bosques galería de Salix alba y Populus alba de la Directiva Hábitat).
Los trabajos, que se iniciaron el 3 de mayo (2023) en pleno periodo de cría y continúan a pesar del alto riesgo de incendios y de utilizar maquinaria pesada susceptible de producir chispas o deflagraciones, consistenen la apertura de pistas con maquinaria pesada (excavadoras).
Estas pistas al abrirse sobre zonas de gran pendiente han alterado el perfil topográfico, generando desmontes y terraplenes, alguno de los cuales ha aterrado tramos del arroyo de San Juan que lleva agua durante todo el año. Algunas pistas van de una ladera a otra del barranco pasando por encima del cauce del arroyo.
Se han talado, además de pinos, enebros, encinas, cornicabras y en el arroyo, sauces y fresnos (algunos de ellos centenarios), que crecían en el bosque de galería. En algunos tramos del arroyo se ha arrasado la orla arbustiva de zarzamoras, rosal silvestre y otras especies. Al eliminar la vegetación, que da sombra a la lámina de agua, se producirá un incremento de temperatura.
Paradójicamente, mientras se produce este destrozo innecesario, no se están podando las ramas secas de los pinos ni se están retirando los troncos tronchados. Tampoco se han tomado medidas para que las urbanizaciones cumplan con la obligación de instalar hidrantes en las calles, sustituir setos altamente pirófitos (arizónicas y cipreses) u otras medidas de seguridad.
Es una actuación que no tiene lógica, afirman las organizaciones ecologistas. Es una zona de alto valor medioambiental, colindante al Parque Regional del Curso Medio del río Guadarrama y espacio protegido Red Natura 2000 Zona de Especial Conservación Cuenca del río Guadarrama, en el que no se puede actuar sin planificación.
Vecinos y ecologistas han reclamado a la Concejalía Delegada de Seguridad, Medio Ambiente y Mantenimiento Urbano del Ayuntamiento de Valdemorillo la paralización de los trabajos y tener acceso al proyecto. También han denunciado las actuaciones invasivas del cauce del arroyo de san Juan ante la Confederación Hidrográfica del Tajo.
Hay que tener en cuenta que el municipio de Valdemorillo está definido por el Plan de Protección Civil contra incendios forestales en la Comunidad de Madrid (INFOMA) como zona de alto riesgo de incendios (ZAR). Por ello debería contar con un Plan de Actuación Municipal ante Emergencias por Incendios Forestales desde el año 2009, pero a día de hoy no está aprobado.
Igualmente las urbanizaciones de Puentelasierra y Jarabeltrán, al estar desconectadas de la trama urbana y rodeadas de superficie forestal, deberían contar con un Plan de Autoprotección, pero tampoco se ha redactado. Por ello, no se puede actuar sin planificación, de una forma tan invasiva sobre masas boscosas que desarrollan una importante función medioambiental y social.
Hola Ana, se agradece el interés que muestras por las actuaciones realizadas en el barranco del arroyo de San Juan , en Valdemorilo pero sería conveniente que la información que facilitas se ajustase a la realidad:
1) Antes de hacer público los hechos denunciados, se presentó escrito detallando la situación ante la Concejalía de Seguridad, Medio Ambiente y Mantenimiento Urbano (nº registro 2023-E-RE-3137), además se solicitaba vista del expediente del plan o proyecto que se hubiera aprobado antes de que las máquinas entrasen a trabajar. A día de hoy no hay contestación.
2) No consta que exista una planificación previa o directrices para dirigir los trabajos. Por ello, la empresa parece que esté trabajando bajo su criterio propio.
3) No existen informes de técnicos de medio ambiente de la Comunidad de Madrid, solo existe un informe de la técnico de medio ambiente del Ayuntamiento que no hace ni una sola mención al medio ambiente. No informa de que el arroyo y su orla de vegetación es hábitat de interés comunitario ni de que las competencias radican en la Confederación Hidrográfica del Tajo, no en el Ayuntamiento.
4) Decir que se ha respetado la vegetación del arroyo no es correcto, baste ver las imágenes publicadas en la noticia y las aportadas por las asociaciones denunciantes a la Concejalía de Seguridad.
5) Decir que no se han talado fresnos centenarios es no ajustarse a la realidad, se han localizado al menos tres fresnos en la ribera del arroyo de más de 40 cm de diámetro, lo que supone una edad en torno a los cien años. Esas fotos están aportadas al escrito presentado a la Concejalía de Seguridad, Medio Ambiente y Mantenimiento Urbano.
6) El informe de la D.G de Emergencias de la Comunidad de Madrid dice textualmente: «En esta zona se recomienda que en la banda que limita con la zona construida, en las proximidades de las vías y caminos más transitados, la vegetación sea aclarada, con cuidado para evitar efectos erosivos, podada en su caso, desbrozada y tratados sus residuos mediante trituración o saca».
La actuación se está extralimitando porque no procede a clarear vegetación en la banda que limita con las calles y caminos, sino que está arrasando en el fondo del barranco, la zona del arroyo.
7) El El hecho de que un arroyo sea intermitente no le resta valor medioambiental en relación a los cursos de agua permanentes. Es más, se consideran un mosaico de hábitats precisamente por sus fluctuaciones. Pero es que el arroyo de San Juan en estos momentos lleva agua, agua que fluye y ya no es temporal porque en él vierten las aguas de dos depuradoras obsoletas de las urbanizaciones:
Una la que se sitúa al final de la Calle Fresnos https://goo.gl/maps/qQj4iPV1K6YyDmnF6.
Y otra bajo la Calle arroyo de San Juan. https://goo.gl/maps/5PqcnQtyiDq8iFjv7
Estas depuradoras NO cumplen con las condiciones mínimas legales establecidas en la normativa actual vertiendo aguas mal depuradas. Posiblemente sean esas aguas residuales mal depuradas las que generen los lodos y malos olores a los que se refiere el comentario.
8) Las asociaciones han sido contactadas por vecinos de ambas urbanizaciones Jarabeltrán y Puentelasierra, han recorrido la zona afectada y, por lo que se desprende, conocen bastante mejor la zona que la autora de estos comentarios.
No nos estamos oponiendo a la actuación, lo que criticamos es la forma en la que se está haciendo, sin una planificación y dirección que indique a la empresa dónde y cómo actuar.
Sería más que deseable que la información que se pretende dar a la población en este artículo, fuese veraz y contrastada antes de dar por hecho y hacer afirmaciones que no se corresponden con la realidad.
1) el arroyo San Juan, que atraviesa y discurre por medio del barranco situado en las laderas de las urbanizaciones Puentelasierra y Jarabeltran, NO es un arroyo con caudal permanente, es meramente estacional, y en muchas ocasiones, incluso en primavera o invierno, genera zonas de agua embalsada que producen un fuerte olor a cieno y podredumbre.
2) No es cierto que se hayan cortado ejemplares centenarios de sauces y fresnos, ya que la planificación de las actuaciones expresa claramente que no se pueden talar árboles de más de 30 cm.
3) el bosque de ribera se ha respetado, procediendo a talar, podar y aclarar toda la vegetación existente en una faja perímetral de 5 metros por cada lado del cauce del arroyo, procediendo así a crear un cortafuegos que permita la entrada de las brigadas antincendios, tan necesarias en una zona con un altísimo índice de posibilidad de incendios especialmente virulento, teniendo en cuenta la orografia, el estado de la masa forestal, en una gran parte seca, tronchada y con troncos cruzados en medio del camino.
4) tanto la guardia civil como Seprona se han personado en la zona de los trabajos, para comprobar y verificar que los trabajos se realizan de acuerdo al plan establecido por la comunidad de Madrid en informes generados durante varios meses. Tragsa es la empresa especialista que está llevando a cabo los trabajos, ciñendose estrictamente al plan establecido.
5) los trabajos aún no se han terminado, por lo que la poda de las ramas bajas de los pinos, en estado especialmente deteriorado, secas y colgando en muchos tramos del tronco aún, se va a ir efectuando de acuerdo al criterio técnico de los profesionales especialistas en medio ambiente de la comunidad de Madrid.
6) las organizaciones, asociaciones etc que han procedido a denunciar los trabajos, no pertenecen al municipio de Valdemorillo, no conocen la zona y no han venido a comprobar las afirmaciones de vecinos a los que les ha molestado la tala, poda y aclaramiento de la zona.