Nabrissa tartésica, Nabrissa Veneria romana, Lebrisah musulmana, Lebrija

En un periplo de dos días, con protagonismo en Lebrija el 22 de julio, hemos cubierto desde los orígenes de la Historia, -Tartessos está considerada como la primera civilización de Occidente, y eso dicho por el viajero historiador griego Hecáteo, siglo sexto antes de Cristo. tiene su peso- hasta el arte más actual, pasando por las Nabrissa tartésica, Nabrissa Veneria romana, Lebrisah musulmana, Lebrija medieval, renacentista y barroca, por el precursor del humanismo renacentista y primer gramático de Europa, Elio Antonio de Nebrija.

Tartessos está datado desde el siglo doce hasta el sexto antes de Cristo. Nos remontamos a las edades del Bronce y del Hierro. Está mencionado en la Biblia. Investigadores varios han aportado distintos orígenes a este pueblo, pero certeza no hay. Si hubo una ciudad llamada Tartessos y donde estuvo situada, es una incógnita con varias candidaturas. Pero el hecho es que existieron, que han dejado huellas de esta civilización en varios lugares del suroeste español y en los museos arqueológicos de Sevilla, Cádiz y Madrid. Y uno de esos lugares fue Lebrija, que una rayita que podría variar la colocó en Sevilla, pero que realmente y sobre todo cuando se habla de flamenco está volcada hacia Jerez y los puertos de Cádiz.

De Tartessos conocimos en Lebrija que fue uno de los poblados protohistóricos emplazados al pie de la primitiva bahía, conocida según fuentes documentales como Sinus Tartessius. Que era una tierra fértil que producía cereales, vid y olivo, abiertos al comercio por su situación geográfica. Que los seis Candelabros de Lebrija eran piezas únicas en el momento de su descubrimiento en 1923; que según las últimas investigaciones son piezas datadas entre el 700 y el 600 a.C. Aprendimos cómo se fundieron estos candelabros. Vimos la maqueta de su posible emplazamiento en el Cerro del Castillo, una muestra de la antigüedad de este sistema de defensa. Fue luego un castrum romano y una alcazaba árabe. Y también el dato importante de su posible relación con el flamenco aunque parezca increíble: Atabales y crótalos, es decir, los tartessios practicaron la percusión, una manifestación artística desde la protohistoria más remota, que ha estado presente en todas las civilizaciones peninsulares posteriores, hasta nuestros días.

Nabrissa conservó su nombre en la etapa romana al que se añadió Veneria, quizá por la fauna de venados en la comarca, quizá por la diosa Venus o por ambas. Fue un puerto importante en la desembocadura del río Betis en el lago Ligustino, por el intenso comercio que llevaba a cabo. La Vía Augusta, calzada que comunicaba a Gades con Narbo Martius (Narbona) y desde ahí por otras vías hasta Roma, pasaba cerca de Nabrissa Veneria. Todos los caminos llevaban a Roma.

En la Lebrija actual, pudimos disfrutar en el sótano de la Casa de la Juventud de una excavación hecha en 2005, que puso al descubierto una elegante domus patricia en cuyo peristilo aún pervive el pequeño altar dedicado a los dioses lares, donde se encontró un busto de la diosa Herma. También el triclinium, comedor y lugar de reposo tras la comida; todo un precedente de la siesta. Una alcantarilla, con su tapa de registro para la limpieza.

Quizá lo más importante que ha perdurado de Nabrissa Veneria es la estructura del Cardo Máximo, hoy calle Antonio de Nebrija.

Queda mucho por excavar, pero la dificultad no es solo de recursos económicos que dependen de subvenciones estatales; es que habría que destruir gran parte de la Lebrija actual.

La caída del imperio desde el siglo tercero supuso la desaparición de una cultura y su modo de vida. De la etapa visigoda tuvimos ocasión de ver una lápida funeraria del 525 d.C. que ahora está sobre la Puerta el Sol de la parroquia Nuestra Señora de la Oliva, auténtico compendio de las culturas medievales y renacentistas de Lebrija, cuyo mayor símbolo externo es el campanario mudéjar del siglo dieciocho, la Giraldilla, y el interno el retablo mayor de Alonso Cano, pasando por sus etapas arquitectónicas que van del románico al barroco.

La Lebrisah musulmana se transformó en la estructura laberíntica de una medina, con sus calles estrechas y casas con patio central para favorecer la sombra y temperatura fresca en las horas de calor, que perdura hasta hoy en su casco histórico y en toda Andalucía. Quedan paños de muralla y lo que fue la torre del homenaje de la Alcazaba. Desaparecieron o se transformaron las mezquitas, palacios y baños con la llegada de los cristianos, que sí respetaron los sistemas de regadío para el cultivo del algodón, lino y otros productos introducidos por los infieles, el adjetivo que se dedicaron mutuamente moros y cristianos. Siempre la religión de por medio, hasta hoy.

Este viaje a invitación de Turismo de la Junta de Andalucía, cuyo foco principal fue Lebrija y su Caracolá flamenca, en la que fuimos atendidos de principio a fin por su delegado municipal de Cultura y Patrimonio, Pepe Martínez, se convirtió en un viaje a través de su riquísima historia por Nabrissa, Nabrissa Veneria, Lebrisah y Lebrija.

Por añadidura, este año 2022, es el Año Nebrija, dedicado a su hijo más ilustre, Elio Antonio de Nebrija, precursor del humanismo renacentista y autor de la primera gramática estructurada europea, publicada en 1492, el año de la conquista de Granada y el descubrimiento de América, hitos del cambio de era.

2022 Año Nebrija.

Nació en Lebrija, estudió en Salamanca y Bolonia, fue profesor en Salamanca y Alcalá de Henares, donde falleció en 1522. De ahí la celebración internacional de los quinientos años de su desaparición física. De ahí su integración en el primer humanismo.

El Año Nebrija fue presentado en el Instituto Cervantes, con el depósito en la Caja de las Letras de su legado In Memoriam; con una gran gala en el Teatro Real de Madrid el 21 de febrero; un exposición en la Biblioteca Nacional de España que abrirá el próximo noviembre hasta febrero 2023; un documental para TVE; un Congreso Internacional en Lebrija; presencia en el próximo Congreso Internacional de la Lengua Española en Arequipa, (Perú); una instalación en la feria del Libro de Frankfort, Alemania, con España como país invitado de honor; creación de un Observatorio Nebrija sobre el español; segunda edición de los premios Nebrija; un panel en el Congreso Internacional de Hispanistas en Neuchâtel, Suiza; proyectos culturales en redes sociales y revistas; conciertos, una obra de teatro, emisión de sellos y billetes de lotería. En el programa han participado cuatro ministerios, tres universidades, el Instituto Cervantes, la Biblioteca Nacional, la Agencia Española para la Cooperación y el Desarrollo (AECID), la RAE, ayuntamiento de Lebrija y otros. #Nebrija500#AñoNebrija2022 .

Congresos Quinto Centenario

Congreso en Lebrija: Elio Antonio de Nebrija, Humanismo y Poder. Se celebró del 3 al 10 de julio 2022; fue convocado por el Ayuntamiento de Lebrija y la Universidad de Cádiz. (UCA) Participaron la Sociedad de Estudios Latinos, el Instituto de Estudios Humanísticos, la red internacional «Europa Renascens», grupo de investigación Elio Antonio de Nebrija de la UCA en colaboración con la Comisión V Centenario de Nebrija del Ayuntamiento de Lebrija. La UCA publicará sus doce bloques temáticos.

El 30 de junio y 1 de julio se celebró el Quinto Congreso Internacional Universidad Nebrija Campus Madrid-Princesa, dedicado a la Lingüística aplicada a la Enseñanza de Lenguas, en el que además del español participaron el francés, inglés y alemán, con el lema En el camino hacia el plurilingüismo.

Congreso Nebrija 500 años. (3 a 5 octubre 2022). Sedes, Universidad de Sevilla y Ayuntamiento de Lebrija. Posteriormente se publicará en la editorial Universidad de Sevilla un volumen con los trabajos del congreso.

De todo ello tuvimos información en Lebrija, en un intenso viernes 22 de julio de este año. Un gusto vivir así.

Próximo artículo: La Caracolá.