La plantilla de Schneider Electric se concentró este 20 de enero 2022 frente a la Embajada de Francia en Madrid tras una jornada de huelga de veinticuatro horas por el desmantelamiento de la planta que la multinacional francesa tiene en la localidad de Griñón.
Desde que la multinacional francesa Schneider Electric decidiera llevarse su planta de Griñón a Italia, los trabajadores del grupo han seguido varias huelgas y movilizaciones para proteger sus puestos de trabajo, ya que la única alternativa que da la empresa es el despido.
Según informó a este periódico Cesar A. Serrano, secretario general CCOO Schneider, a pesar de contar con un producto de futuro y con niveles de rentabilidad más que aceptables, la multinacional francesa ha tomado la decisión de salvar puestos de trabajo en otras plantas europeas a costa del desmantelamiento de la planta de Griñón.
El objetivo de la concentración frente a la Embajada francesa, además de dar visibilidad el conflicto, era el de hablar con el embajador francés para dar cuenta de la situación real de la planta de Griñón, así como de las consecuencias negativas que su cierre traería tanto para las personas trabajadoras como para una región bastante golpeada por la desindustrialización.
«Esta concentración es un punto de partida. La meta es que ningún puesto de trabajo de Griñón salga de Griñón. Los puestos de trabajo, según la propia contabilidad de la empresa, son rentables, ¿por qué se los van a llevar?», se preguntaba Julián Teso, secretario General de CCOO de Industria de Madrid.
Defender los puestos de trabajo
Por su parte, Paloma López, secretaria general de CCOO Madrid, destacó que «vamos a defender los puestos de trabajo, no solo de los 180 trabajadores y trabajadoras de la fábrica de Schneider, sino también de todos aquellos trabajadores y trabajadoras de las empresas auxiliares. Para nosotros la deslocalización de la fábrica de Griñón supone un desequilibrio territorial y una mayor pobreza para la comarca sur, que ya está bastante castigada».
Finalmente, varios representantes de la plantilla de la fábrica de Schneider en Griñón, junto con Julián Teso y Paloma López, se reunieron con el responsable de Industria de la Embajada francesa y expusieron la situación de la planta, las reivindicaciones de la plantilla y lo que supone para la comarca sur de Madrid el cierre de esta fábrica.
El responsable de la Embajada pidió que registraran en la sede diplomática todas las reivindicaciones planteadas para hacérselas llegar al embajador francés y que éste transmita la información a la cúpula del Grupo Schneider Electric
