CC.OO. Sanidad Madrid informa de que la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ignora las reclamaciones del Hospital Infanta Sofía de San Sebastián de los Reyes, que desde principios de esta semana tiene colapsado el Servicio de Urgencias porque el centro no puede abrir camas para hospitalizar puesto que no tiene profesionales que las atiendan, después de aprobar el cierre de más de una veintena de camas este verano y debido a que mantiene cerrada desde su inauguración la torre cuatro, con capacidad para doscientas camas, y una UCI de dieciséis puestos para pacientes en estado crítico.
El pasado lunes, 12 de julio de 2021, había más de cincuenta pacientes atrapados en las urgencias del centro, con una media de edad de 85 años, muchos procedentes de residencias de mayores. Cerca de una treintena permanecen en esta situación desde hace cinco días. Necesitan hospitalización y el centro no puede abrir camas porque no tiene personal de enfermería para ello. Los pacientes no tienen patología asociada al coronavirus, por lo que tampoco pueden ser trasladados al Hospital Isabel Zendal, que solo está preparado para atender a pacientes con Covid-19.
Ante esta situación, los responsables del hospital, según informaron a la sección sindical de CC.OO. en el centro, solicitaron al Servicio Madrileño de Salud (Sermas) que permitiera el regreso de los profesionales adscritos al Infanta Sofía que tuvieron que desplazarse a trabajar al Hospital Zendal -sin plantilla propia-. Pero la Consejería de Sanidad se ha negado a reponer en su centro a estos profesionales.
Otra vía para poder hospitalizar a estos pacientes ha sido la de iniciar el traslado a otros hospitales con mayor capacidad o menor presión asistencial, pero el circuito de derivación tampoco funciona. Centros como el Hospital de Cruz Roja ha rechazado la solicitud de traslado y otros como el Hospital La Paz ha admitido algunos, pero otros -ya allí- los ha devuelto al Infanta Sofía.
Al límite
La plantilla de Enfermería en el Infanta Sofía está al limite. La ratio recomendada es de una enfermera por cada diez pacientes. En la actualidad, un profesional de Enfermería atiende a catorce y quince pacientes y muchos de ellos doblando turno voluntariamente para mantener al máximo rendimiento la hospitalización.
Elena Cabrerizo, responsable de Comisiones Obreras en el centro, explica que los doblajes ya están amortizados y no se pueden estirar más. Expone que «el cansancio entre los profesionales es mayúsculo», por todos los meses que han estado sufriendo una presión asistencial sin precedentes, debido a la pandemia. Y, advierte: «No vamos a permitir que los profesionales se queden sin vacaciones porque esto traería también consecuencias en su salud».
En consecuencia, el sindicato reclama al Sermas que amplíe sin dilación la plantilla estructural para poder contratar más personal interino, y que permita el regreso inmediato de los profesionales del centro desplazados al Zendal.