La Fundación Madrina solicita al Globierno de España implantar medidas para favorecer la repoblación rural de familias vulnerables con carácter urgente, para conseguir el doble objetivo de «dar vida a los pueblos» evitando que se cierren sus escuelas y servicios colaterales, y «deslocalizar la pobreza materno-infantil desde las grandes urbes hacia las áreas rurales sin población infantil».
La Fundación Madrina (FM) acumula dieciséis años de experiencia con su Programa «Pueblos y Abuelos Madrina», en el traslado de familias vulnerables y desahuciadas con hijos menores desde zonas urbanas a rurales.
La Fundación afirma que, desde el Gobierno, y fuera de las declaraciones institucionales, no existe voluntad política ni presupuesto para trabajar por las zonas rurales, dejando sin apoyos a pueblos, simplemente «les dejan morir». Para la entidad «una cadena es tan fuerte como su eslabón más débil» que es por donde se suele romper, por ello es necesario erradicar la pobreza de las familias más vulnerables en España y que han sufrido especialmente como consecuencia de la pandemia.
Por todo ello, FM exige implantar hasta quince medidas de apoyo a la despoblación rural, de cara a conseguir que los pueblos vuelvan a tener vida y puedan convertirse en el «amortiguador de las desigualdades sociales» que actualmente sufre España a través de las familias en «nueva pobreza» y que se sitúan en las grandes urbes, y muy especialmente las que tienen hijos menores a su cargo, que son los que más padecen esta situación de crisis económica.
Considera que el aislamiento sanitario y social entre comunidades de España, unido a las diferentes y anquilosadas leyes y ayudas sociales que actualmente rigen cada una de las Comunidades Autónomas y el Estado, y que impiden la movilidad geográfica entre territorios de familias vulnerables que buscan una mejora en su calidad de vida, «anclan definitivamente la pobreza al lugar de origen», impidiendo erradicarla, y generando una más grave «pobreza intergeneracional» y permanente en el tiempo, especialmente en las grandes urbes, que puede aumentar como consecuencia de la pandemia.
Este hecho de «anclar la pobreza al lugar de origen» genera «bolsas de pobreza territoriales» especialmente llamativos en asentamientos en las grandes urbes o cercanos a ellas, y que perduran en el tiempo convirtiéndose en «pobreza territorial y estructural» que genera aún más marginalidad y delincuencia.
Asimismo, consideran paradójico que en España haya una gran «desigualdad social y sanitaria» entre comunidades, que especialmente lo sufren los niños, careciendo de asistencia sanitaria y social dependiendo del lugar de nacimiento de los padres, lo que genera una mayor pobreza «materno-infantil». Se estima que un dieciocho por ciento de los niños nacidos en España no cuentan con documentación ni derechos sanitarios plenos. FM considera que «Si no cuidamos por igual de todos los niños, no habrá futuro para España».
Para evitar todo ello, Fundación Madrina propone al Gobierno:
- Crear un mapa de zonas rurales con alertas de despoblación e inminente pérdida de servicios en diferentes niveles.
- Favorecer en zonas rurales y pequeños municipios el realojo de familias vulnerables con hijos menores y en riesgo de situación de calle, procedentes de grandes urbes, con la habilitación de viviendas en propiedad del municipio, o de particulares.
- Generar un plan de mejora y habitabilidad de viviendas vacías en estos municipios de zonas rurales de la España vaciada, para uso exclusivo de realojo de familias vulnerables con hijos menores, ofreciéndolos como residencias con un alquiler mínimo social y con una carencia de pago de hasta 6 meses, hasta que la familia empiece a cotizar.
- Recuperación de la red de transporte público rural que conectan las zonas rurales con las capitales de provincia, donde se hayan los servicios principales de hospitales y registros, actualmente eliminadas y desatendidas por parte del Ministerio de Fomento.
- Crear una ‘tarjeta social única’ e igualitaria en todo el territorio español, que proporcione los mismos derechos y ayudas sociales para todas las familias vulnerables con hijos menores, y que incluya igualmente ayuda social con posibilidad de pago para transporte, medicamentos, alojamiento y comida.
- Que cualquier familia vulnerable que se traslade de un municipio o de comunidad autónoma a otra, tenga acceso a los mismos derechos sociales y sanitarios de la comunidad de la que procede, manteniendo la antigüedad de la comunidad de origen, y sin tener que esperar de dos a tres años para tener una antigüedad de empadronamiento y ser atendido con los mismos derechos.
- Crear una ‘tarjeta sanitaria única’ en todo el territorio español que preserve los mismos derechos sanitarios de la población más vulnerable e infantil, especialmente en atención primaria, hospitalaria, así como en relación a recetas y medicamentos prescritos a través de receta electrónica; con el fin de salvaguardar la salud y la integridad de los más vulnerables, especialmente niños, aun careciendo estos de empadronamiento, registro de nacimiento o documento de residencia, o bien tarjeta roja de refugiado.
- Que el empadronamiento no sea una causa de exclusión social o de pérdida de derechos sociales, y que se garantice el derecho a empadronamiento ñuniversal de toda persona que viva en territorio español, manteniendo la antigüedad del mismo empadronamiento para así permitir la movilidad geográfica entre comunidades sin perder estos derechos; especialmente para familias vulnerables con hijos menores, que deban trasladarse a zonas rurales desde otra comunidad o municipio para conseguir un empleo y un hogar.
- Crear una “Caja solidaria única intercomunitaria” financiada por el Estado, y que asuma los derechos sociales y sanitarios de las familias vulnerables que se muevan de una comunidad a zonas rurales de otra comunidad, permitiendo así que las familias busquen una mejor calidad de vida en estas últimas con alojamiento o trabajo.
- Garantizar la asistencia sanitaria y social plena y permanente de familias realojadas con hijos menores en zonas rurales.
- Generar un Plan de empleo y emprendimiento en zonas rurales a través de un programa de “emprendimiento rural” que favorezca, promueve y recupere los trabajos tradicionales de estas zonas, especialmente fomentando la agricultura y ganadería ecológica y ambiental.
- Amparo y protección del hogar y empadronamiento obligatorio para mujeres gestantes y madres con hijos menores de tres años, a las que les es imposible empadronarse en ningún lugar o bien acceder a ninguna vivienda por su condición de madre con hijos menores.
- Aumento de las transferencias directas del estado hacia las zonas rurales objeto de despoblación, fomentando la movilidad hacia estas zonas de familias vulnerables con menores a cargo, con el fin de paliar la pobreza rural especialmente en colegios, vivienda, transporte, sanidad, “escuelas interconectadas”, y ayudando asimismo a salir del impacto negativo generado por la pobreza extrema y “materno infantil” de las familias vulnerables situadas en las grandes urbes.
- Ayuda directa especial a familias vulnerables que deseen realojarse en zonas rurales; sugiriendo que las ayudas sociales se den por unidad familiar y no por hogar o empadronamiento, ya que hay hogares donde conviven varias familias en la misma situación de pobreza y que nunca podrán acceder a ninguna ayuda social, por esta situación de hacinamiento injusto, provocado por la gestión de la pandemia.
- Apertura y agilización de la administración del estado y de las administraciones locales y autonómicas, para mitigar el efecto perverso que este hecho origina sobre el aumento de la pobreza de familias vulnerables, quebrando los derechos sociales, sanitarios y laborales de estas familias vulnerables y que se exige en esta situación de crisis.