El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha participado en el Consejo Europeo extraordinario en el que se han tratado temas como la aprobación definitiva del Marco Financiero Plurianual (MFP) y del Fondo de Recuperación, sobre el que ha subrayado la necesidad de aprobarlo «cuanto antes» y de que tenga mecanismos de control y desembolso «robustos y transparentes», pero que permitan su «ejecución ágil», algo que «tanto necesita España para una pronta recuperación» de las consecuencias de la pandemia.
El jefe del Ejecutivo ha destacado respecto a los fondos que «España y la mayoría de los Estados Miembros hemos reiterado la importancia de cumplir los tiempos. La presidencia alemana del Consejo está haciendo una muy buena labor en ese sentido. Tenemos que apoyarla y avanzar cuanto antes en las negociaciones con el Parlamento Europeo. No podemos ahora obstaculizar la aprobación de un acuerdo histórico como el que alcanzamos en julio. Nuestros ciudadanos no lo entenderían».
Durante el Consejo Europeo (CE), los veintisiete han abordado además la autonomía estratégica de la Unión Europea (UE) en el ámbito económico, las relaciones UE-China y el Brexit. En temas de política exterior, además de la situación en Bielorrusia y el envenenamiento de Alexei Navalny, Turquía ha centrado buena parte de los debates.
En este sentido, se ha conseguido un acuerdo para la estabilidad y la desescalada en el Mediterráneo Oriental, como ha venido defendiendo Sánchez, con una apuesta por el diálogo, en el que el Gobierno de España ha tenido un papel muy destacado para la mediación en la zona: «España ha contribuido a rebajar la tensión, en el marco de los esfuerzos mediadores liderados por la presidencia alemana, el presidente Michel y el Alto Representante», ha destacado el presidente.
Sánchez ha reiterando la solidaridad con dos Estados Miembros, como son Grecia y Chipre, y ha señalado que hay que contar con Turquía para «alcanzar una solución duradera a muchos de los conflictos que lamentablemente proliferan en la región mediterránea».
Sobre a la autonomía estratégica de la UE, se pretende asegurar un crecimiento sostenible e inclusivo, que genere empleo y que refuerce la posición de la Unión en un mundo globalizado. Sánchez ha detallado que se han comprometido a fortalecer el mercado único para «seguir protegiendo la cohesión social y territorial de la UE y apoyar a las empresas, en estos momentos de fuerte incertidumbre».
En este sentido, entre otros, se facilitará la Agenda Verde Europea y la transformación digital que, según Sánchez va a «suponer un gran impulso al desarrollo de tecnologías digitales clave, como los datos, o el desarrollo de una nube europea».
En las relaciones con China, los veintisiete han destacado que se comparte una misma visión en temas como la tecnología, el comercio, la Organización Mundial de la Salud y el cambio climático. En este último aspecto, Sánchez ha señalado el reciente anuncio del presidente Xi Jinping en el que aseguraba que China tenía como objetivo la descarbonización para el año 2060.
La UE, en relación con Bielorrusia, ha hecho un llamamiento «al cese de los ataques, por ambas partes». El presidente del Gobierno ha reiterado el apoyo a la sociedad civil bielorrusa y a la defensa de derechos de sus ciudadanos. Asimismo, ha añadido Sánchez, «condenamos el intento de asesinato de Alexei Navalny: las autoridades rusas deben cooperar en una investigación independiente».
Por otro lado, los veintisiete han hablado sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea: «Un Brexit sin acuerdo será malo para todos, pero sobre todo para el Reino Unido», ha señalado Sánchez.
Los veintisiete han mostrado su preocupación sobre la evolución de la pandemia de COVID-19 en el continente europeo y han compartido análisis, estrategias y la «necesidad de que sigamos dando una respuesta coherente y homogénea en el conjunto de la UE», ha concluido el presidente del Gobierno.
