El vicesecretario para Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Fernando Giménez Barriocanal, señaló este 19 de mayo de 2020 que la emergencia sanitaria provocada por la pandemia de COVID- 19 ha afectado notablemente al balance económico de la Iglesia, e instó a los fieles a contribuir con nuevas donaciones.
En rueda de prensa virtual convocada para informar sobre los el dinero recaudado por la Iglesia Católica en la Declaración de la Renta de 2019, el responsable de Asuntos Económicos explicó que la Iglesia española recaudaba mensualmente una media de veinte millones de euros de las colectas ordinarias en las parroquias, y que en los dos meses desde el comienzo de la pandemia, con la suspensión de la misa pública, la Iglesia ha dejado de percibir cerca de 38,5 millones de euros.
Informó de que a pesar de haber creado la iniciativa del portal, www.donoamiiglesia.es, un “cepillo virtual” para hacer aportaciones, las donaciones hasta el mes de abril 2020 alcanzaron solo 1,6 millones de euros.
Justificándolo por estos datos, Giménez instó a los católicos a asumir un compromiso constante en sus aportaciones periódicas tal y como se hace actualmente con las subscripciones a plataformas de cine y series o de música y no solo en tiempos de pandemia como el actual.
Importancia de las parroquias
Fernando Giménez explicó que «la principal fuente de financiación de las parroquias tienen que ser las aportaciones de los fieles. Los fieles tienen que pagar el sueldo al cura y tienen que pagar las instalaciones, tienen que colaborar con su esfuerzo y también económicamente. Esa cultura la tenemos que plantear».
Es por ello que subrayó la relevancia de «hacer saber lo que representa para un barrio la presencia de una parroquia y la importancia de cada una de las actividades que realiza en pro de la convivencia y desarrollo social».
No obstante, la idea del episcopado español es continuar también con la progresión en la contribución de los españoles a la Iglesia por medio de la recaudación de los impuestos sobre la Renta.
Contribuyentes
En un comunicado, la CEE informa de que, según los datos aportados por la Secretaría de Estado de Hacienda a la Iglesia, el resultado definitivo del IRPF 2018, que corresponde a la recaudación de 2019, la cantidad asignada por los contribuyentes fue de 285.225.797. Esta cifra supone un 6,37 por ciento más que el año anterior.
El número de declaraciones a favor de la Iglesia fue de 7.192.002. No obstante, si se tienen en cuenta las declaraciones conjuntas, son más de 8,5 millones de ciudadanos los que destinan el 0,7 por ciento de sus impuestos a la Iglesia.
Memoria de actividades
El episcopado ofreció también la memoria de actividades desarrolladas en 2018, cuando la cantidad obtenida en la declaración de la renta alcanzó 256,54 millones de euros.
Conforme a lo presupuestado a lo largo de ese año, 252,78 millones de euros, la mayor parte, 202,09 millones, fue adjudicada a las diócesis; 18,39 millones se utilizaron para pagos de la Seguridad Social del Clero y 2,32 millones se consignaron al sueldo de los obispos.
Cerca de treinta millones constituyen la aportación extraordinaria a Cáritas diocesanas, centros de formación, campañas de comunicación, ayudas a proyectos de rehabilitación y construcción de templos, actividades pastorales nacionales e internacionales, instituciones de la Santa Sede, entre otros.
Sostenimiento de las diócesis
Por otro lado, la nota describe que el dinero para el sostenimiento de las diócesis no tiene una finalidad específica, se integra en el presupuesto global de cada diócesis y cada una de ellas lo incorpora a sus fondos propios y lo distribuye según sus necesidades con criterios propios, pues su organización es autónoma.
El informe revela que en 2018 las diócesis contaron con 974,31 millones de euros de ingresos, obtenidos – además de la asignación tributaria – de las aportaciones directas de fieles, los ingresos de patrimonio y otras actividades económicas, otros ingresos corrientes e ingresos extraordinarios.