El Ayuntamiento de Parla ha obtenido nuevamente el Sello de Huella de Carbono, esta vez incluida la Compensación, al haber conseguido en 2019 la absorción de 73 toneladas de CO2 con el plan de reforestación del arroyo Humanejos.

Desde hace años, Parla está calculando su huella de carbono para identificar oportunidades de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Es decir, que, además de calcular y reducir progresivamente la huella de carbono, ha compensado un 6,07 por ciento de las emisiones de CO2, equivalente la absorción de 73 toneladas de dióxido de carbono en 2019 gracias a este proyecto.

Con ello se ha conseguido que Parla, por primera vez, obtenga los tres sellos que otorga el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Miteco: Registro, Reduzco y Compenso la Huella de Carbono, que son el máximo de objetivos que se pueden conseguir con el sello. 

La huella de carbono describe la cantidad total de emisiones de CO2 (dióxido de carbono) y otros gases de efecto invernadero que son causados directa o indirectamente por un individuo, organización, evento o producto a lo largo del ciclo de vida del mismo. Ha sido creado por el Ministerio para luchar contra el cambio climático, fomenta el cálculo y reducción de la huella de carbono por parte de las organizaciones españolas y promueve los proyectos que incrementan los «sumideros de emisiones» en España. Un ejemplo es el ya mencionado proyecto de reforestación del arroyo de Humanejos.

Según el Ministerio, el sello nace con una doble finalidad: por un lado, facilita a las organizaciones el poder demostrar su participación en el registro; y, por otro, permite reflejar el grado de esfuerzo acometido por las mismas en la lucha contra el cambio climático. 

Concha Moreno
Periodista. Tras más de 30 años en el sector de la construcción en una publicación para profesionales, me dediqué al mundo de la solidaridad a través de un partido político, ocupándome de la comunicación. Esa época determinó el comienzo de un camino dirigido a la defensa de los derechos humanos, a la denuncia. Poco después me instalé en México. Publiqué en un par de periódicos y en una revista literaria, donde edité poesía. A través de Periodistas en Español comencé a relatar lo que sucedía allí. Tras siete años de estancia en el país azteca, en 2018 regresé a España.

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