Una cadena humana unirá este sábado 27 de febrero de 2021 el ayuntamiento de Cáceres con el santuario de la Virgen de la Montaña, con ciudadanos convocados por la Plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres, para mostrar de nuevo el rechazo de la población cacereña al proyecto de mina a cielo abierto que una empresa extranjera pretende instalar a las puertas de Cáceres, ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1986.

La Plataforma indica que a través de las redes sociales «nuestros vecinos y vecinas nos piden encarecidamente una nueva visibilización de la lucha contra la mina, y por ello, hemos organizado esta actividad de gran magnitud, cargada de simbolismo y nunca antes vista en Cáceres».

Con este acto simbólico se pretende mostrar la cercanía que existe entre la Montaña de Cáceres, lugar donde quieren instalar la mina, y la Plaza Mayor, lugar donde se localiza el Ayuntamiento, institución que representa la soberanía popular y último órgano decisorio competente.

Cercanía que estará unida por la cadena humana que cubrirá todo el trayecto. Los participantes con mascarilla, se colocarán a una distancia interpersonal de dos metros para respetar las medidas establecidas por las autoridades ante la crisis sanitaria.

La Plataforma explica que la cadena humana «unirá nuestros dos grandes patrimonios: el Patrimonio Histórico-Cultural con nuestro valioso Patrimonio Natural» y con ella «solicitaremos a nuestros dirigentes políticos que no le den la espalda a la gran riqueza natural que nos rodea, que dirijan su mirada hacia la Montaña de Cáceres y la Sierra de la Mosca, que la incorporen al gran patrimonio de nuestra ciudad, y que busquen una protección real y efectiva para que nunca más vuelva a verse amenazada».

Añaden que «de la misma forma que nunca se excavaría una mina en la Parte Antigua por mucho oro que se encontrara en el subsuelo, tampoco consideramos que se pueda destruir nuestra Montaña, emblema de Cáceres y lugar sagrado, para sacar un poco de litio».

La actividad contempla además la bajada de un pequeño olivo desde el santuario de la Virgen de la Montaña hasta las puertas del Consistorio, y una muestra de tierra de la sierra para ser plantado en un macetero que se situará en las escaleras del Ayuntamiento y donde permanecerá durante un tiempo para recibir los cuidados de todos nuestros vecinos.

Este olivo, procedente del corazón verde de la Montaña, representará «la determinación en la lucha del pueblo cacereño contra la barbarie de la instalación de una mina a cielo abierto incrustada en las faldas de nuestra seña de identidad. Cuando crezca, será ubicado en otro lugar simbólico de Cáceres, para que las generaciones futuras tengan presente el logro alcanzado gracias al amor de un pueblo hacia su ciudad y hacia la naturaleza que la rodea».

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